Arturo Ruiz

 

Ilustración de Yeye Torres @ye2draws


El recorrido


Es 30 de enero de 2024 y todavía no tengo ninguna memoria reproducida de estos días hace 47 años, estamos en medio de conmemoraciones reconocidas en el marco de la Semana Negra. Es una mañana soleada, pero hace frío. Comenzamos con una serie de instrucciones metodológicas en las cuales se definen tres momentos particulares para comprender los espacios: violencia, resistencia y emociones. Estas palabras serán los sentidos con los cuales me dispongo a escuchar y a observar el recorrido que iniciamos en la antigua Plaza Luna.


Figura 1. Homenaje Arturo Ruíz (2024)

   
  Fuente: Grupo de Investigación "Memoria Social Contra la Impunidad", Universidad Complutense de Madrid.


En este lugar de memoria, ahora llamado Plaza de Santa María Soledad Torres Acostaestá la placa en memoria de Arturo Ruiz, (la que luchan sus familiares por mantener allí ya que no cuenta con el reconocimiento del Estado español), pero hace 47 años, a unos metros de allí - en la calle de la Estrella, fue asesinado. Comienza a narrar lo ocurrido Iñaki, un compañero que pertenece al del Colectivo por los Olvidados de la Transición (COT).


Iñaki es hombre de contexto, inicia su relato con el panorama social y político de 1976, un año de muchas tensiones en Madrid y de movimiento dentro de los colectivos obreros y estudiantiles, relata, que para el momento habían más de 400 mil obreros en huelga, la sociedad estaba en particular tensión por la aprobación de la ley de amnistía y la lucha desde los barrios era la cotidianidad en la ciudad.


Figura 1. Testimonio Iñaki Alrui (2024)

 Fuente: Grupo de Investigación "Memoria Social Contra la Impunidad", Universidad Complutense de Madrid.

El 23 de enero de 1977

Es domingo, la protesta pensada y en marcha por la amnistía para lxs presxs políticos del franquismo. Las pintadas en la calle “las paredes no estarán limpias mientras las cárceles estén llenas” ponían de manifiesto la demanda popular de amnistía. En el relato del compañero, inicia la manifestación, aunque se encuentra plagada de policía, a su vez, hay redadas de grupos fascistas que estaban ubicados justamente en la Plaza Luna. Esta parecía ser una zona frecuentada por este tipo de grupos, quienes se reunían en cafeterías cercanas a la Plaza. 

                                                                Figura 2. Testimonio Iñaki Alrui (2024)

 Fuente: Grupo de Investigación "Memoria Social Contra la Impunidad",  Universidad Complutense de Madrid. Foto: Archivo de la Transición.


La complicidad del Estado

Fue asesinado por José Ignacio Fernández Guaza, miembro de un comando ultraderechista de cuatro personas con vínculos con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad. Un reconocido filofascista de la época en medio de sus servicios de inteligencia, es decir, mientras trabaja en compañía de la policía que intentaba reprimir la manifestación en la Calle de la Estrella, acciona un arma disparando directamente en el pecho de Arturo Ruiz. Entre toda la conmoción, llevaron a Arturo a una casa de socorro para recibir atención médica, pero había llegado ya sin signos vitales.

                                                                 Figura 3. Manifestación de estudiantes. Madrid, 1977.

Fuente: Archivo de la Transición

El 23 de enero de 1977 Arturo Ruiz, de 19 años salió a las calles a manifestarse

Era un joven nacido en Darro y vivía en el Barrio El Pilar de Madrid, su familia se había trasladado debido a que su padre ocupaba el cargo de Secretario Municipal en Gargantilla de Lozoya. Estaba matriculado en el BUP nocturno y trabajaba como albañil. Era miembro activo de la Joven Guardia Roja y de Comisiones Obreras, y se destacaba por su compromiso político y activismo. Al igual que muchos otros jóvenes de la época, participaba en manifestaciones callejeras exigiendo amnistía y la legalización de todos los partidos políticos y sindicatos.

Toda una vida de lucha

Su hermano, Manuel Ruiz, luchó hasta el último momento tratando de descubrir la verdad sobre el asesinato de su hermano, buscando la justicia que el sistema judicial le ha negado a su familia durante años y esforzándose por recuperar la memoria democrática de todas las víctimas de la "Transición". 

                                              Figura 4. Poema Javier Almazán. Madrid (2024)
 Fuente: Grupo de Investigación "Memoria Social Contra la Impunidad", Universidad Complutense de Madrid.


A lo largo de la lucha por la memoria de Arturo y por los Olvidados de la Transición, la familia, y particularmente, su hermano recibieron múltiples negativas por parte de la justicia española como lo relatan diferentes archivos de prensa, a pesar del reconocimiento de su asesino, aún no se hace justicia, a pesar de los esfuerzos. Sólo por medio de una querella interpuesta ante la justicia argentina ha sido posible reabrir las investigaciones del caso, sin mucho éxito aún debido a las influencias con las que todavía tienen contacto las personas implicadas en el caso.


En una nota de Lo que Somos la familia relata:

"Tras pedir justicia, de manera infructuosa en el Estado español, nuestra familia acudió a Buenos Aires a interponer una querella criminal contra los responsables del asesinato de Arturo. Únicamente allí en el marco de la Querella Argentina atendieron nuestra petición de justicia…"

 

Otros recursos documentales 

Este año, se estrenó en Andalucía en el cine Megarama de Granada la película- documental "Las armas no borrarán tu sonrisa" Es una narración en primera persona de la familia de Arturo, es un relato de todos los procesos de impunidad a los que se han visto expuestas las víctimas de la Transición y la lucha por combatir el olvido. 


               Figura 5. Portada libro "La matanza de Atocha y otros crímenes de Estado", Carlos Portomeñe (2022)


El compromiso de recordar

Figura 5. Placa memoria Arturo Ruíz
Foto tomada por: Cartografía social de Madrid

Por un momento este espacio en Madrid ha cambiado totalmente, ya no sólo por la placa en conmemoración a Arturo, sino por conocer y reconocer la historia de lo ocurrido, por ver en las calles una transformación del lugar a través de la memoria de los compañeros del COT.

Es de esperarse que la superposición de las memorias y la ciudad no son obstáculos para repasar los hechos, todo nos conduce a una forma de comprender las transformaciones del lugar, sus tensiones, sus llantos, pero también las luchas, las resistencias y me pregunto...

¿Cómo podremos superponer esta narrativa sobre el lugar para resignificarlo?


Diana A. Mateus García.

Estudiante del Máster de Estudios Contemporáneos en América Latina

Comentarios